Posiblemente esta sea una de las copas cerveceras más bonitas que existen. Una copa tipo Cáliz con un formato embriagador digna de una buena cerveza trapense, como lo son todas las elaboraciones de la Brasserie de Rochefort, una cervecería belga que produce tres cervezas bajo el sello de cerveza trapista. La fábrica está asociada con la abadía de Rochefort, cuyos orígenes se remontan al siglo XIII y sus monjes llevan elaborando cerveza desde el siglo XVI, siendo su cerveza la principal fuente de ingresos.
Un grupo de monjas fundó la abadía en 1230 con el nombre de Le Secour Notre-Dame y posteriormente los monjes cistercienses lo tomaron en 1464. Es posiblemente en ese momento cuando comienza la actividad cervecera, aunque los registros más cercanos datan de 1595. Pero eso es difícil de contrastar debido a que la gran mayoría de los archivos del monasterio se destruyeron en la Revolución francesa.
Con esta copa no solo disfrutarás de estas grandes cervezas sino que te sentirás también un poco monje, o monja, y quizás hayes también un poco de paz interior.
