De Ranke

Guardianes de la tradición con dos grandes secretos: Guldenberg y Noir de Dottignies

En tiempos donde las pequeñas cerveceras belgas echaban el cierre, Nino Bacelle decidió luchar a contracorriente en defensa del auténtico sabor del lúpulo y la cebada. De Ranke surge en 1994 como una especie de sublevación ante los sabores neutros y más dulces que impone la industria macro para buscar afianzarse entre los bebedores mayoritarios. Los argumentos de Nino son sólidos, como su contunden Guldenberg, una poderosa Belgian Strong Ale, o la cerveza oscura Noir de Dottignies, otro clásico en su estilo. 

La historia de De Ranke

De la limonada a la cerveza. No está mal pensado el cambio. En 1930 Germain Noffels abrió su fábrica de refrescos en 1930 en Wevelgem. Se llamaban VALPO y se comercializaron hasta después de la Segunda Guerra Mundial. Pasó de generación en generación y llega a la hija de Germain, Irene, y su yerno Napoleone ‘Nino’ Bacelle.

Nino Bacelle en 1994, comenzó su recorrido con el lanzamiento de la excepcional Guldenberg. En 1996 se une al proyecto el también Guido Devos y en 2005 se establecen de forma definitiva en un emplazamiento en el que crear su magia. Desde al inicio apuestan claramente por la calidad de las materias primas usadas en la elaboración de sus cervezas, especialmente el lúpulo, de la región de Poperinge, convencidos de que es el ingrediente determinante en la mayoría de sus productos.

Este último fue el que desechó los limones y empezó a apostar por la cebada. En 1981 comienza la elaboración de cerveza en la fábrica y en 1989 ya pasa a ser la actividad exclusiva. Nace así la Cervecería Nino Bacelle en 1994 y, con ella, una de sus emblemáticas y más deliciosas creaciones. Hablamos de la Guldenberg, una deliciosa Belgian Strong Ale cuya primera tirada fue de 9.000 litros. En un primer momento, la alquimia era un mero pasatiempo. 

Nino acabó dedicándose a tiempo completo. En la ecuación de sus birra entra al poco Guido Devos, catador y cervecero aficionado. Ponen en común recursos y conocimientos. La cervecería Ni no Bacelle pasa a llamarse De Ranke, como se conoce actualmente, un claro guiño a las vides en las que crece el lúpulo. Poco a poco llegan nuevas etiquetas. La deliciosa navideña Père Noël, la amarga XX Bitter, la Lambic Kriek, Noir de Dottignies… La fábrica ha crecido hasta la producción anual de 500.000 litros, de los que un 50% se exportan a más de 20 países. Japón, Reino Unido, Suecia… Muchos ya pueden disfrutar de las delicias de De Ranke. 

El proyecto surge como respuesta al cierre de muchas de las pequeñas cerveceras belgas, las que mejor producto cocinaban. Nino fue a contracorriente de esta inercia a favor del consumo masivo, algo que había restado amargor a muchas cervezas a favor de un sabor más neutro. Su elaboración tradicional evita el uso de extractos y cualquier materia prima local que no sea de primerísima calidad y no olvida el medio ambiente: la energía que consumen proviene de paneles fotovoltaicos. Una birra 100% auténtica es posible sin renunciar a la ética.

Las cervezas de De Ranke

En su catálogo destacan dos creaciones. La Guldenberg, una deliciosa Belgian Strong Ale cuyo sabor evoca a la esencia más auténtica de las rubias belgas; y la Noir de Dottignies, una auténtica cerveza oscura cocinada con siete maltas diferentes. Estas son sus propuestas: 

• Guldenberg
• XX Bitter
• Saison de Dottignies
• Noir de Dottignies
• X Simplex
• Amer-Amer
• Franc Belge
• Père Noël
• Hop Harvest
• XXX Bitter
• Cuvée de Ranke
• Kriek de Ranke
• Vieille Provision
• Wijnberg
• Mirakel
• Back to black

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Las De Ranke son difíciles de encontrar en España más allá de las tiendas y pubs especializados. Lo mejor, a la puerta de casa. Haz tu pedido en Escerveza y descubre el amplio abanico de sabores de esta casa belga de la birra.